1. Ten clara tu intención: tu intención sostendrá tu motivación y te ayudará a encontrar el estilo que mejor te conviene.

Define tu intención para cada práctica:
“Hoy voy a estar atenta a mi respiración” “hoy voy a notar mi corazón”
“hoy trabajaré mi voluntad”

2. Date tiempo para llegar a la esterilla: Procura no llegar con prisas a tu clase, y permítete unas primeras respiraciones para “aterrizar” en tu practica.

3. RESPIRA: Se disminuye la presión en el corazón al inspirar y se ayuda a bombear la sangre al espirar. En las posturas una respiración profunda ayuda a estirar la fascias y tejidos conectivos del cuerpo.

4. NI MUCHO, NI POCO: Procura el equilibrio en tu practica, no vayas hasta tu limite pero tampoco te aburras en las posturas. Mantener una “mente de principiante” te permitirá sacarle el mayor provecho a cada clase. La paciencia y la aceptación deben ser tus principales aliadas.

5. COQUETEAR ANTES DE ABRAZAR: Nuestra mente nunca quiere ser la de menos y siempre va a intentar la versión mas avanzada de cada postura, permite ir entrando, coquetear con ella para que tu cuerpo se vaya adaptando y así no tengas que pasar por molestas tensiones innecesarias.

6. ESCUCHA LAS SEÑALES DE TU CUERPO:
Respiración fluida: cuando se corta o se dificulta es tiempo de hacer una pausa o quizás regresar a la versión fácil de la asana.
Equilibrio: Si empiezas a tambalear detente y respira.
Cansancio: No venimos a la practica a extenuarnos, recuerda que la respiración debe mantenerse fluida todo el tiempo (asi esté agitada). Date el permiso de parar cuando lo necesites.

7. ENTRAR Y SALIR: Cada asana tiene una forma correcta de entrar y salir, por favor asegúrate de seguir las instrucciones del profesor!

8. TODO AYUDA:
Ropa suave y cómoda: una en la que simplemente te sientas bien y a gusto practicando.
La Esterilla: No necesitas una esterilla profesional, pero asegúrate que sea una esterilla especial para yoga (máximo de 6mm de espesor y lo suficientemente antideslizante para un practica cómoda)
Elementos: El uso de bloques, mantas y cintas puede ser de gran ayuda mientras comienzas a flexibilizar tus músculos y articulaciones, no te sientas mal por usarlos.
Hidrátate: Asegúrate de beber agua pura antes y después de tu practica.
Come ligero: Maximo 2 horas antes de practicar o si necesitas un tentempié suave máximo media hora antes.

9: ABRETE A LO NUEVO: Quizás se te proponga cantar un Mantra o hacer un gesto con tus manos o visualizar tus centros de energía… mantén la mente abierta…

10. LLEVA EL YOGA A CASA: quizás lo que aprendiste de la respiración durante la clase o alguna postura para estirar la espalda, proponte unos minutos al día para practicarlo en casa y ayudar a tu cuerpo a recordar a integrar lo visto en la sesión.